Tal y como te contábamos el pasado mes de noviembre de 2017, el Papa Francisco recibió por parte de la prestigiosa casa de Sant’Agata Bolognese un Lamborghini Huracan. A pesar de que muchos se llevaron las manos a la cabeza pidiendo explicaciones a la Iglesia Católica, este regalo escondía una buena causa que honra a Lamborghini, aunque para desgracia del Papa no podrá conducirlo ni lucirlo en sus visitas como Jefe de Estado en otros países…
Esta unidad fue personalizada para crear un Huracan exclusivo y único en el mundo, todo un gran trabajo llevado a cabo por el departamento de Ad Personam. Hicieron un claro guiño a los colores del Vaticano en el exterior gracias a su pintura color blanco “Bianco Monocerus” y líneas doradas “Giallo Tiberino”. Como ya sabíamos, iba a ser vendido al mejor postor por la casa de subastas RM Sotheby’s, destinándose el dinero a numerosas causas solidarias desde África hasta en Nineveh (Irak).
El modelo tiene un precio que parte de los 183.000 euros, pero esta unidad, al ser exclusiva y tener la bendición y autógrafo del Pontífice, se ha revalorizado hasta límites insospechados en la subasta, alcanzando una cifra total de 715.000 euros. Este Lamborghini Huracan es otro presente que se suma a la lista de regalos curiosos que recibe el Papa Francisco, aunque no es el primero.
El pontífice recibió en su día una Harley-Davidson por parte de la compañía americana de motocicletas junto con una chaqueta. Ambas fueron subastadas por cantidades astronómicas teniendo en cuenta su precio original, y tanto las marcas como las diferentes ONGs ven como buenos ojos este tipo de acciones que suelen ser muy mediáticas.