A pesar de los múltiples obstáculos a los que todavía debe enfrentarse el coche eléctrico enchufable, parece que nuestros gobernantes están emperrados en hacernos que creer que es la única opción de futuro, de ahí que las eléctricas, los fabricantes de automóviles y los principales proveedores de combustibles ya se hayan puesto manos a la obra.
Hace unos meses os contamos que nada menos que 1.200 gasolineras en España deberían convertirse en ‘electrolineras’ de aquí a dos años, algo que poco a poco se va haciendo realidad, con cada vez más puntos de carga para coches eléctricos en gasolineras de nuestro país. El gran problema es que la gran mayoría de ellas todavía no son todo lo rápidas que nos gustaría…
Sin embargo, parece que BP ha encontrado la solución gracias a su nuevo súper cargador, capaz de recargar las baterías lo suficientemente rápido (cuánto tarda en cargar un coche eléctrico) como para obtener unos 160 kilómetros de autonomía en apenas 10 minutos. Es algo similar al nuevo Supercargador V3 de Tesla, capaz de dividir 1 MW de potencia entre cuatro automóviles para garantizar una tasa de carga de 250 kW por vehículo.
Bautizado como Ultracharger 150 (por su potencia de 150 kW), el nuevo punto de carga de BP cuenta con conectores CCS y Chademo, por lo que es compatible con la mayoría de los coches eléctricos presentes en las carreteras del Reino Unido, donde iniciará su fase de pruebas. En ellos, los usuarios podrán o bien suscribirse al servicio para utilizarlos regularmente o pagar por uso.
La instalación de los nuevos puntos de carga dará comienzo a lo largo del mes de julio, uniéndose a la actual red Polar que se compone de más de 6.500 puntos de carga públicos en todo el Reino Unido. Por ahora, son pocos los cargadores que ofrecen estos niveles de potencia en el país británico. Los más rápidos cuentan con unos 50 kW, salvo en el caso de los Superchargers de Tesla (120 kW) y la red Ionity (150 kW).
Por esta razón, el anuncio de BP Chargemaster es el mayor compromiso en cuanto a resultados, ya que el desarrollo de la infraestructura de carga del Reino Unido se considera uno de los factores más importantes para que este pueda cumplir los objetivos del cambio climático. Pero ojo, porque lo mismo ocurre en otros países como España, donde esta infraestructura no nos vendría nada mal.