El pasado mes de octubre se inició la comercialización del nuevo Audi A8. El nuevo buque insignia de la marca ha comenzado a llegar a los clientes a finales de noviembre con dos motorizaciones V6, una diésel y otra de gasolina, con potencias respectivas de 210 kW (286 CV) para el A8 50 TDI, y de 250 kW (340 CV) en el caso del A8 55 TFSI.
Como has podido ver en las imágenes, la cuarta generación del Audi A8 se caracteriza por un diseño elegante y un chasis con soluciones vanguardistas, así como por un concepto de manejo en el que cobran protagonismo las pantallas táctiles. Ahora, la compañía de los cuatro aros amplía la gama de equipamiento opcional para su buque insignia con el paquete exterior deportivo que acentúa la poderosa presencia del sedán de lujo.
Entre las novedades exteriores del paquete podemos encontrar un nuevo elemento de diseño en la zona inferior del frontal, contornos de las entradas de aire más definidos, faldones laterales ligeramente ensanchados, un paragolpes trasero rediseñado que integra una inserción con forma de rombo y un difusor claramente diferenciado o una tira de aluminio que bordea la parte inferior de la carrocería.
Los clientes podrán solicitar el paquete exterior deportivo a partir de finales de enero, con un precio de 2.382 euros para el Audi A8 50 TDI. Los asientos deportivos podrán solicitarse para cualquier versión de motor y carrocería del modelo, con un precio de 3.310 euros para el TDI.
En el interior, entre las posibilidades de personalización destacan indudablemente los nuevos asientos deportivos con reposacabezas ajustables cuyo efecto óptico es el de estar integrados en el respaldo. Estos cuentan con regulación eléctrica en altura, ajuste neumático para la banqueta y los laterales del respaldo -que en este caso tienen un contorno aproximadamente 15 milímetros más pronunciado-, climatización o función de masaje, entre otros. Adicionalmente encontraremos un guarnecido de la tapicería en forma de rombos con perforaciones y logotipos S, así como varias opciones de cuero.