Cuando mucha gente no está dispuesta a alabar tu trabajo, muchas veces siempre te queda el consuelo de compartir con el resto lo bien que haces las cosas. Sin embargo, si por mucho que te tires flores la gente no termina de estar de acuerdo contigo, algo falla. Y esto es precisamente lo que le ocurre a Tesla, ya que no es ningún secreto toda la polémica que hay entorno al Autopilot últimamente.
Como parece ser que las palabras no bastan, el fabricante ha decidido que la mejor opción para recuperar la confianza de los clientes y aficionados es elevar el precio de su sistema de asistencia a la conducción, ya que así refleja mejor el valor añadido que este asistente supone. ¿Estamos ante otra de las locuras de Elon Musk o ante una genialidad comercial?
Hasta hace nada, todos los clientes que adquirían un Tesla tenían que pagar 2.500 dólares para beneficiarse de las ventajas del asistente de conducción semiautónomo, una cifra que ascendía hasta los 3.000 dólares en caso de que optaran por instalarlo posteriormente. Esto es posible gracias a que todos los vehículos de la marca fabricados a partir de 2014 equipaban el hardware necesario para instalar dicha función, pagando esos 500 dólares adicionales por el software de desbloqueo.
Sin embargo, junto con el anuncio del nuevo Tesla Model S P100D y la nueva batería de 100 kW, el fabricante estadounidense ha aprovechado para incrementar el precio del Autopilot en otros 500 dólares. Así, los precios finales ascienden hasta los 3.000 dólares en caso de pedirlo a fábrica con la función y a 3.500 dólares para aquellos que lo deseen posteriormente.
Sí, ya sé lo que muchos estáis pensando: «al visionario este se le ha ido la olla otra vez, después de todo lo que ha pasado, ¿quién va a pagar más por esa función?«. Pues bien, analicemos este hecho objetivamente. Aunque muchos pensábamos que este incremento se debe a la nueva generación del asistente y la instalación de una mayor cantidad de sensores en los coches, un portavoz de Tesla lo desmintió a Electrek asegurando que esta medida se ha tomado «para reflejar mejor el valor del producto«. Y si lo piensas, tiene hasta sentido.
Si miramos los precios de los sistemas de control de crucero activo de otras marcas premium, nos daremos cuenta de que el precio final con las opciones de equipamiento que te obliga a instalar es bastante más elevado, además de ser incluso más rudimentarios, por lo que Tesla se puede permitir un leve incremento del mismo. Al fin y al cabo los problemas que han ocurrido se deben esencialmente a un mal uso del mismo.
Y por otra parte es como ir a un hotel de cinco estrellas y encontrarte con que tienes que pagar por el WiFi cuando en miles de hoteles de peor calidad es gratis: al final lo vas a pagar. Igual ocurre en el caso de Tesla, ¿alguien que paga 60.000 dólares por un coche se va a fijar en una diferencia de 500 dólares? No, así que de paso, ¿por qué no tener unos ingresos extra?