Esta semana os traemos el nuevo Volkswagen Tiguan al apartado de pruebas de nuestra web. El Tiguan transfiere la idea del Touareg a otra categoría o al menos así nació su concepto.
Presentado en Los Angeles, el “pequeño Touareg” salió al mercado a finales del año 2007, y este es su primer lavado de cara desde su salida al mercado.
Lejos de parecer un lavado de cara, nos encontramos ante la confirmación de un producto con bastante éxito en Europa que vuelve actualizado a las carreteras para demostrarnos que no se puede hacer un vehículo mejor dentro del concepto SUV.
Su diseño:
Se trata de un nuevo concepto de vehículo que nunca antes había sido visto en Volkswagen. Un diseño totalmente alemán que ha surgido de la gran demanda que tiene este segmento.
Si nos ponemos a hablar de su diseño, lo primero que hay que comentar es su característica parrilla frontal que tiene un contorno potente. Se ha dado un paso hacia delante en la marca puesto que se han mantenido los mismos símbolos introducidos en los modelos más recientes y se han llevado al segmento SUV.
Pese a que este renovado Tiguan sigue teniendo la esencia del Concept Tiguan se han modificado partes como el capó que ahora realza la forma de los faros delanteros y confiere al vehículo una “cara” muy expresiva. Los faros de xenon, por sí solos, son un rasgo visual y ahora aún más debido al montaje de luces diurnas LED que no solo otorgan una gran apariencia y expresividad al vehículo en la noche, sino que gracias a esa tecnología de diodos luminosos, ahora también lo hace de día. Los parachoques colocados bajo los faros, junto con las luces antiniebla con marco propio situadas a cada lado, le proporcionan una inconfundible imagen de ya por si acentuada por su “pico” característico de la versión Country.
Las medidas del Tiguan no han sufrido alteraciones, a excepción de la unidad probada que cuenta con ciertas características que potencian su espíritu más allá del asfalto. Sus proporciones hacen que el coche destaque en la urbes pero que no sea aparatoso como el resto de los SUV que circulan.
Las líneas laterales se extienden desde los faros delanteros hasta los traseros lo que le dan claridad y fuerza. Su silueta deja entrever su origen alemán por los pasos de rueda, la línea de la ventana que discurre hacia la parte trasera, las superficies tridimensionales de las puertas y los parachoques.
El diseño de la parte posterior del vehículo es el típico de Volkswagen. Típico pero completamente diferente al del Touareg. Típico porque la construcción básica de las luces traseras sigue la línea estilística del Golf y del Passat y descansan sobre los hombros de la carrocería. La enorme puerta del maletero se extiende hasta el parachoques y es un elemento que reúne a la vez, elementos clásicos y puros de los SUV con formas urbanas muy contemporáneas. Bajo los faros traseros está la placa de la matrícula que se encuentra hundida y dibujando una cara. La sección inferior del parachoques, sin pintar, es un claro guiño a la capacidad off road sobre todo en la unidad de prueba.
El modelo probado sufre ciertas variaciones muy puntuales pero hacen de este acabado, la versión más campestre.
El Country, es un Tiguan nacido con vocación offroad que se distingue de sus hermanos de gama por un frontal en el que el ángulo de ataque pasa de los 18º a los 28º. Este aumento de 10 grados permite afrontar desniveles con gran soltura y firmeza, optimizando las ya ágiles características del vehículo. El frontal de 28º en combinación con el programa de marcha offroad, que se incorpora de serie en toda la gama, convierten al Tiguan en el más versátil de las opciones.
Este modelo también incorpora la protección inferior del motor, los listones protectores laterales en el color de la carrocería y unas características lamas en la parrilla del radiador en color negro. Además equipa barras longitudinales en el techo.
En lo que a equipamiento interior se refiere, el Country incorpora, adicionalmente al equipo de la versión Sport, el tapizado de asientos y puertas en tela “Energy”. Además, los asientos Confort delanteros, regulables en altura y ajustables en la zona lumbar para mejorar la comodidad que además cuentan con cajones inferiores de almacenaje.
La versatilidad y la flexibilidad de vehículo se subrayan gracias a la tracción 4MOTION, una tracción 4×4 muy neutra que junto con los increíbles neumáticos que monta este acabado permite afrontar superficies complicadas como la nieve sin temor alguno.
Por supuesto, en autonocion.com no hemos podido contener la curiosidad que teníamos sobre las habilidades del vehículo y una parte de la prueba se realizó aprovechando las primeras nieves. La afirmación es clara, el Tiguan no es otro SUV, quizá sea una opción muy buena si quieres un vehículo versátil, bien acabado y muy equipado.
Su interior:
En el interior predominan los colores negros y los acabados en plata como casi todos los vehículos germanos. Unos acabados de gran calidad pero muy espartanos y serios. Al igual que el resto de los Volkswagen todo esta donde tiene que estar, los asientos son cómodos y gracias a la estandarización de los modelos, los instrumentales son claros y se repiten de un modelo a otro (con ciertos cambios). A pesar de las tonalidades oscuras del equipamiento interior, el ambiente de la cabina del Tiguan resulta muy acogedor gracias a su amplio techo solar panorámico transparente de 1.34 metros de largo por 0.85 metros de ancho que se puede montar de forma opcional. El techo es practicable a diferencia de otros modelos de la competencia. El único “pero” que le veo es la cortinilla eléctrica perforada que permite pasar luz al interior del vehículo. A diferencia de otras marcas, no ofrecen una cortinilla opaca. El techo al igual que el xenón son un extra montado en la unidad de prueba. Personalmente sólo recomendaría la luz de Xenon por la calidad de la misma y la seguridad añadida en la conducción.
Al sentarse en el vehículo, uno percibe en seguida que se trata de un interior bien pensado, espacioso y diseñado de forma ergonómica. Cualquiera de las cinco plazas del Tiguan resultan igual de cómodas.
La banqueta de asientos trasera se puede ajustar de forma longitudinal y puede plegarse de forma asimétrica. Con los asientos plegados, el Tiguan puede transportar objetos de hasta 2,5 metros de longitud y transformarse en un MPV.
La capacidad total del maletero puede llegar a alcanzar los 1.510 litros y la fuerza del motor TDI de 140 cv nos dan la posibilidad de remolcar hasta 2.500 kilos en su versión 4MOTION.
Su mecánica:
En cuanto a los motores el nuevo Tiguan debemos decir que Volkswagen ofrece un total de 7 motores (3 diesel y 4 gasolina) combinables tanto con cambio manual como con cambio automático DSG de 7 velocidades. Los nuevos motores TSI ofrecen potencias que van desde los 122 a los 210 CV, mientras que a los habituales diesel TDI 140 y 170 CV se une ahora un equilibrado TDI 110 CV. Todos ellos destacan por unas cifras de consumo y emisiones realmente contenidos, alcanzando algunos de los valores más eficientes del segmento.
Además, por primera vez, se incorporan las Bluemotion Technologies a los motores TDI 140 con tracción 4Motion, consiguiendo que se reduzca el consumo y las emisiones de CO2. En autonocion.com damos fe de ello pues los consumos del Tiguan durante la prueba rondaron los 6 litros a los 100 km.
Estos consumos puede parecer elevados pero para la masa de este vehículo, los neumáticos tipo off road que monta, la altura respecto al suelo y la tracción integral, hemos de concluir en que son realmente bajos. No obstante, la semana que viene, realizaremos la prueba del Peugeot 3008, el “enemigo del Tiguan, o al menos el competidor francés”.