La sexta generación del Ford Fiesta ya está aquí. La firma presentó ayer por la tarde la gama inicial con la que llegarán a mediados del año que viene a los concesionarios estos polivalentes. Más grande, equipado y seguro, también sufrirá un ligero aumento en el precio.
La nueva gama Fiesta presumirá por contar con cuatro opciones bien diferenciadas, además de eliminar los niveles de acabado Ambiente y Trend para así dejar algo de espacio al más sencillo Ka+. Por tanto la oferta del Fiesta arrancará con los Titanium y ST-Line, dejando a los clientes más exquisitos que opten por el lujoso Vignale o la opción aventurera Active.
Todos los acabados presentan diferencias importantes en su estética, incluyendo paragolpes de diseño específico, llantas de aleación exclusivas, etc. Muy interesante es que Ford no se haya olvidado de la carrocería de tres puertas, una opción cada vez menos común.
El interior ha ganado en calidad de terminación y la presentación es más agradable. Ya sabemos que podrán ir equipados con tres pantallas táctiles, con 4,2, 6,5 y 8 pulgadas. Sólo las dos últimas incluirán el sistema Ford SYNC 3.0, dejando al más sencillo la integración del móvil en el propio salpicadero.
El equipamiento contará con elementos como el asistente al aparcamiento sin manos, alerta de tráfico cruzado en maniobras de marcha atrás, sistema de visión 360 grados, detector de peatones, arranque por botón, techo panorámico, tapizado en piel, asientos térmicos, aviso pre-colisión, alerta de objetos en ángulo muerto, etc.
Las mecánicas que llegarán en un primer momento contemplan un nuevo bloque de 1,1 litros derivado del Ecoboost pero sin turbo y que desarrollarán 70 y 85 CV de potencia. El 1.0 Ecoboost se mantiene intacto con versiones de 100, 125 y 140 CV aunque en 2018 se unirá una evolución con desconexión selectiva del cilindro central.
En cuanto a la oferta diésel, contará con el 1.5 TDCi y 85 CV como opción de acceso. Será el más eficiente de la familia con unas emisiones de sólo 82 g/km de CO2. Por encima estará el 1.5 TDCi con 120 CV en combinación con una caja manual de seis velocidades. Será el Fiesta diésel más potente jamás comercializado.
Con 4,04 metros de longitud, el Fiesta crece un poco y se sitúa en la zona alta del segmento. No han comunicado las dimensiones del maletero pero han dejado caer que se mejoran todas las cotas interiores en relación al Fiesta actual.