«Desde Rusia con amor«. TopCar quiere reivindicarse como uno de los grandes preparadores del momento, aunque ya llevan mucho tiempo sorprendiéndonos con sus creaciones más radicales, entre las que podemos encontrar desde un brutal BMW X6 que rivalizaría con el Lamborghini Urus, o un Porsche Panamera bautizado como Stingray GTR Edition. Ahora nos presentan uno de sus proyectos más extremos y opulentos, donde la fibra de carbono y el metal precioso cobran todo el protagonismo.
Ha sido bautizado como Stinger GTR Carbon Edition, y toma como base al Porsche 911 Cabriolet convirtiéndolo en una máquina aún más salvaje y exclusiva. TopCar ha dejado de lado la imagen de «niño bueno» que tiene habitualmente el nueveonce para convertirlo por primera vez en un bólido que inspira respeto y agresividad. Para ello, han bañado su carrocería en fibra de carbono: desde el paragolpes delantero y trasero, los faldones laterales, el capó, la cubierta de los retrovisores y las tomas de aire.
Aunque una vez echamos un vistazo a su interior, la fibra de carbono pasa a un segundo plano, y es que numerosos detalles y elementos están acabados en oro. Podemos encontrar el metal precioso por todas partes, empezando por la palanca de cambios, los botones de la consola central, las salidas de ventilación, los tiradores de las puertas o junto al arranque y selector de iluminación. Pocas veces hemos visto un interior tan opulento y extravagante como en este Stinger GTR Carbon Edition, pero los rusos saben bien que para llamar la atención es necesario buscar los extremos.
También hemos sabido que no todo se queda en un interior y exterior rediseñado, sino que bajo el capó encontramos una importante actualización en su rendimiento para aumentar la potencia hasta 750 CV. ¿Te atreverías a conducirlo por la calle?
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