La semana pasada supimos que el grupo Toyota –Toyota y Lexus– cerró el año 2019 con casi 90.000 unidades vendidas en España.
8 de cada 10 vehículos vendidos por la compañía en España fueron modelos híbridos eléctricos, representando el 78% de las ventas conjuntas y un total de 69.769 unidades.
Por marcas, Toyota comercializó en 2019 un total de 79.464 unidades y Lexus 9.915, sumando 89.379 unidades entre ambas. El total de modelos híbridos eléctricos vendidos ha alcanzado las 69.769 unidades, con más de 59.854 de Toyota y el 100% de las ventas de Lexus.
La suma de ventas de ambas marcas representó una cuota de mercado del 5,9% —5,3% Toyota y 0,6% Lexus—, batiendo el récord histórico de la compañía en España e incrementando su presencia conjunta en el mercado en un 0,3% respecto a 2018.
Si tomamos como referencia que la marca ha vendido 69.769 unidades híbridas, ¿en qué ha repercutido la estrategia hibrida del grupo nipón en España?
Bien, esto es interesante. Aunque los híbridos tenían muchos detractores, cada vez son más los conductores que se dan cuenta de que son la mejor opción para los que realizan la mayoría de sus recorridos por urbes a bajas velocidades y es que las tasas de uso del modo 100% eléctrico se disparan incluso por encima del 50% del tiempo de uso, repercutiendo en el consumo notablemente y sobre todo, en el bolsillo y las emisiones.
Hace poco, desde la otra parte del mundo recibimos un curioso estudio en el que se hacían unos cálculos de emisiones y ahorro de litros de combustible que hemos decidido compartir con vosotros porque son simplemente impresionantes.
El estudio habla sobre una media de kilómetros que ronda los 12.600 km al año, media que ronda la que sacamos en nuestro país, que por cierto no supera 15.000 km.
Dicho esto, vamos al ajo. Según este estudio, una flota de 69.769 vehículos híbridos ahorran unas 50.000 toneladas de CO2 anuales respecto a modelos homólogos en combustibles de gasolina -en el caso del diésel, un poco menos y es que la media de emisiones de CO2 en los híbridos es de 90 gramos por km, en los diésel sube a 100 gramos por km y en los gasolina se dispara a 125 gramos por kilómetro-.
El hecho de poder circular en modo 100% eléctrico durante más de la mitad de su uso en urbe permite, según el estudio, conseguir un ahorro de unos 300 litros anuales de combustible por coche. Si tenemos en cuenta este ahorro en litros y lo multiplicamos por el número de coches híbridos que la marca vendió en España en 2019 nos encontramos que según el estudio, esta flota permite un ahorro de 20.930.700 de litros de combustible, una salvajada que si multiplicamos por el precio del litro de gasolina 95 octanos nos da cifras económicas estratosféricas.
Aunque todo estos datos los hemos sacado de un estudio y ya sabemos cómo son estos estudios y lo que hay detrás, sí que podemos confirmar el hecho de que para nuestras pruebas sí que contamos con el porcentaje de uso del modo eléctrico y del consumo medio y si respectamos un 80% de los trayectos en conducción urbana, el porcentaje de uso del modelo eléctrico se dispara a porcentajes bastante interesantes y elevados.
A pesar de todo esto y sin ánimo de querer venderte un híbrido (que no es el enfoque de este artículo, sí que podemos, además de todos estos supuestos ahorros que nos confirma el estudio en el que basamos este artículo)
Antes de hablar de las ventajas de los vehículos híbridos debemos diferenciar entre un vehículo híbrido «autorrecargable» -como los denomina Toyota- y un vehículo híbrido-enchufable -que precisa de una toma de carga-. Es sencillo, los híbridos-enchufables son aquellos que podemos conectar a la red para cargarlos (PHEV), mientras que los híbridos autorrecargables dependen de la frenada regenerativa y del motor de combustión para poder obtener la energía con la que moverse en modo eléctrico. Hay que matizar un poco más, porque los híbridos enchufables también son «en parte» «autorecargables» y es que durante las frenadas y mediante algunos modos de conducción, pueden «autorecargar» sus baterías -con ciertas limitaciones debido a que subatería es mucho más grande y ofrece ventajas con una autonomía en modo 100% eléctrico mucho mayor-.
Ahora sí, vamos al grano con las ventajas del vehículo híbrido:
- Conlleva una bajada en las emisiones de CO2 y NOx, así como una mayor eficiencia de combustible. Salvo cuando circulemos por autopista (donde se usa más el motor de gasolina), obtendremos buenas medias de consumo gracias al motor eléctrico que aprovecha las frenadas y desaceleraciones.
- Ayudas a la compra en determinados lugares y épocas.
- Menores costes de mantenimiento porque prescinden o reducen los elementos mecánicos que sí tienen los coches convencionales, así que sufren menos averías y cuentan con menos piezas de desgaste que hay que sustituir -esto es un hecho-. Además, gracias a la frenada regenerativa ciertos componentes como las pastillas y los discos de freno se desgastan menos y duran a veces hasta el triple -hemos encontrado coches híbridos que han cambiado las pastillas por primera vez a los 100.000 km-.
- Ahorros en peajes. Algunos tramos de las autopistas permiten a los coches híbridos obtener descuentos.
- Ahorros impositivos, pues las bajas emisiones de CO2 de los coches híbridos les permite beneficiarse de la exención del Impuesto de Matriculación.
- Los coches híbridos tienen una bonificación de hasta el 75 por ciento en el Impuesto de Circulación en muchas ciudades.
- En los coches híbridos no tienen que ir más de dos personas a bordo para que puedas circular por el carril BUS VAO ECO.
- Contarás con ahorros del 50 por ciento en el aparcamiento en las zonas de estacionamiento regulado (SER).
- Los días de restricciones, puedes moverte por la ciudad con tu coche. Igualmente, podrás entrar en las zonas de bajas emisiones de las ciudades.
- Con el temor que hay y la futura prohibición a los coches de combustión interna en España (especialmente los diésel), te será difícil deshacerte de uno, por lo que el valor residual de un híbrido es superior.