Toyota ha vuelto a posicionarse a la vanguardia de la innovación con la presentación del Toyota FT-Me, un prototipo eléctrico de batería que busca redefinir la movilidad urbana. Este modelo, desarrollado por Toyota Motor Europe, responde a las crecientes exigencias de los entornos urbanos modernos con un diseño compacto, versátil y tecnológicamente avanzado.
Un concepto innovador para la micromovilidad
El FT-Me es un vehículo de dos plazas que mide menos de dos metros y medio de largo, unas dimensiones que lo hacen altamente maniobrable y eficiente en ciudades donde el espacio es un recurso escaso. Su diseño, inspirado en el casco de un piloto, emplea una combinación bicolor en blanco y negro, proporcionando una estética moderna y sofisticada.
Uno de los aspectos más innovadores del FT-Me es su accesibilidad. Diseñado para conductores noveles, incluso a partir de los 14 años en algunos mercados, este modelo permite una personalización que lo adapta a diversas necesidades, desde jóvenes hasta profesionales. Además, su tecnología de visibilidad 360º y su conectividad avanzada, con integración de smartphones para entrada sin llave, garantizan seguridad y comodidad.
El compromiso de Toyota con el medio ambiente se manifiesta en el FT-Me a través del uso de materiales reciclados y una reducción del 90% en su huella de carbono comparado con vehículos urbanos convencionales. Su sistema de propulsión es altamente eficiente, consumiendo tres veces menos energía que un coche eléctrico con batería de alta capacidad.
Destaca también su innovador techo solar, capaz de generar energía suficiente para recorrer entre 20 y 30 kilómetros diarios sin necesidad de una recarga externa.
El Espacio que Smart Deja Vacío
El lanzamiento del FT-Me se produce en un contexto en el que smart, pionero en la movilidad urbana con modelos como el fortwo y forfour, ha abandonado progresivamente este segmento. La marca alemana, que en sus inicios revolucionó el concepto de coche urbano, ha virado hacia modelos más grandes y con mayor autonomía, alejándose de su propuesta original.
Toyota, en cambio, parece dispuesta a ocupar ese nicho con una filosofía de movilidad sostenible. Mientras smart apuesta por SUVs compactos y de mayor autonomía, Toyota reafirma su compromiso con los vehículos urbanos ultraeficientes, accesibles y adaptados a las necesidades de un público diverso. La llegada del FT-Me podría marcar un punto de inflexión en la estrategia de la movilidad eléctrica urbana, ofreciendo una alternativa viable y ecológica a la congestión y la contaminación en las ciudades.
Marcas como Citroën también han apostado por la micromovilidad con modelos como el Citroën AMI. Ya sean modelos urbanos, objetos de movilidad o cuadriciclos ligeros, personlamente veo esta solución mucho más interesante para la ciudad que un coche tremendamente grande y pesado.