Tal y como os adelantamos en 2019, Toyota y Subaru están «a fuego» con su relación y es que ambos fabricantes se van a nutrir de la cooperación y el «saber hacer» de cada uno en sus campos de especialidad.
Hoy hemos sabido que Toyota y Subaru están acelerando el desarrollo de un sucesor de los GT86 y BRZ, y según algunos medios como Autocar, el nuevo modelo de Toyota podría incluso renombrarse como GR86 en honor a Gazoo Racing, algo que viene aplicando en modelos como el GR Supra o el GR Yaris.
Ambos modelos deportivos fueron lanzados en 2012 tras haber sido desarrollados de forma conjunta entre Toyota y Subaru y aunque las ventas son relativamente bajas y son modelos con muchos detractores, son productos que reflejan fielmente el espíritu deportivo de ambas marcas.
El jefe de Toyota, Akio Toyoda, es uno de los principales defensores del uso de modelos de rendimiento para mejorar la imagen de la marca en la división Gazoo Racing. El renacer de la denominación Supra en cooperación con BMW, el desarrollo del GR Yaris y el futuro GR86 podrían hacer que la marca ofreciera su espíritu deportivo en una misma familia, adecuada para cada bolsillo.
Al parecer, el deportivo asequible que podría surgir en cooperación con Subaru presentaría cambios bastante sustanciales. Mientras el modelo de 2012 y que podemos comprar hoy en día se basa en una plataforma Subaru, el nuevo modelo haría uso de la plataforma global TNGA que además, ha demostrado poderse combinar y escalar perfectamente tal y como han demostrado con el GR Yaris, modelo que recibe el 50% de la plataforma delantera de un Yaris y el 50% de la plataforma trasera de un segmento superior.
A pesar de hacer uso de la plataforma de Toyota se espera que Subaru tome una vez más la delantera con el desarrollo del tren motriz. Aunque pueda parecer una tontería no montar el motor del Yaris en un deportivo con más empaque, parece que Subaru podría ofrecernos nuevamente un Bóxer de cuatro cilindros y aspiración natural, algo que podría no ser de agrado de todos, sobre todo de aquellos que siguen pensando que «no turbo, no party».
Según el medio anteriormente citado, el modelo podría cambiar su cilindrada de 2.0 litros a una superior en litros para aprovechar el motor que encontramos en el Legacy o el Outback.
Si Subaru se decanta por esa mecánica, el motor podría superar los 250 CV de potencia, una mejora significativa respecto a la actual generación -que ofrece 200 CV- y aunque seguiría sin haber turbo, igual algunos detractores verían con mejores ojos al modelo.
Toyota y Subaru también estarían mejorando el atractivo estético de la nueva generación tanto en el interior como en el exterior. Tanto el BRZ como el GT86 fueron muy criticados por sus materiales interiores y su espartano interior por lo que se espera que «sin perder la cabeza» y sin olvidad que son deportivos de bajo coste y peso, ambos ofrezcan un habitáculo muy mejorado.
Con todos estos cambios y actualizando el modelo a la economía actual, lo más probable es que tanto el BRZ como el GR86 de nueva generación aumenten sustancialmente su precio, algo que podría aproximar el coste de adquisición de los modelos a los 40.000 euros, lejos de los 32.000 por los que podemos adquirir el modelo actual.
Por el momento no sabemos nada sobre la hibridación o no del modelo pero lo que sí que sabemos es que Toyota está considerando versiones híbridas de modelos de automóviles deportivos en un futuro no muy lejano, algo que podría llegar con las baterías de estado sólido que se empezarán a probar por parte de Toyota este mismo 2020. A pesar de esto no creemos que se molesten en hibridar este modelo ya que por sus bajas ventas no representa peligro para la media de emisiones de CO2.
Como puedes ver, lo que sabemos por el momento es limitado pero muy prometedor…