El regreso del Toyota Mark X GRMN ha sido toda una sorpresa que nadie esperaba en el Tokyo Auto Salon 2019, después que hayan pasado cuatro años desde su desaparición del mercado. Una edición limitada que está basada en su predecesor y de la que solo se fabricarán 350 unidades, en exclusiva para el mercado japonés. Esta berlina inspirada en el Mark X 350 RDS se distingue por los ajustes realizados por la división deportiva GRMN, con un V6 atmosférico que produce 318 CV de potencia.
En el exterior presenta un nuevo kit visual que incluye desde un paragolpes delantero más agresivo y entradas de aire más grandes, así como algunos detalles en fibra de carbono. Su mirada se distingue por una sutil parrilla, algunos detalles en negro brillante y llantas de aluminio forjado de 19 pulgadas firmadas por BBS. Aunque lo mejor está en la zaga, donde encontramos un paragolpes trasero con nuevas tomas de aire, y un llamativo difusor con cuatro puntas de escape.
También en la zaga, encontramos un sutil spoiler y el logotipo de GRMN bien visible. El sistema de frenos ha sido mejorado y además, los clientes que así lo deseen podrán equipar un techo de plástico reforzado con fibra de carbono (CFRP) con un precio adicional de 2.164 euros. Gracias a este extra podremos ahorrar hasta 10 kg de peso y ayudar a que el centro de gravedad del vehículo sea más bajo. Pero ojo porque en el interior hay más…
El habitáculo se caracteriza por unos asientos deportivos exclusivos en Alcantara y un volante de tres radios forrado en piel con el distintivo de Gazoo Racing. Además, podemos encontrar numerosos detalles y acabados en fibra de carbono, ‘piano black‘ y pedales en aluminio. Bajo el capó esconde un motor V6 atmosférico capaz de producir un total de 318 CV y 380 Nm de par motor, asociado a una caja de cambios manual de seis velocidades que envía toda la potencia directamente al eje trasero.