El vehículo autónomo de Uber parece que tendrá que esperar… Eran aproximadamente las 18:25 de la tarde del pasado viernes cuando uno de los coches de prueba de la compañía californiana – un Volvo XC90– sufría un aparatoso accidente. La policía recibía una llamada en Tempe (Arizona) como consecuencia de un accidente de tráfico, al llegar al lugar del suceso se encontraron con uno de los prototipos que está utilizando Uber para recopilar datos en la carretera, este había sufrido serios daños al volcar en medio de la vía junto con otros dos vehículos implicados.
Según asegura uno de los portavoces de la policía de Tempe el culpable fue el otro vehículo, el Volvo XC90 de Uber estaba siendo supervisado por un conductor que aún no se sabe si pudo llegar a tomar el control del vehículo. El impacto fue lo suficientemente fuerte como para volcar el vehículo que quedó seriamente dañado, con las ventanillas rotas y daños importantes en la carrocería. Las imágenes nada más llegar a las redes sociales comenzaron a circular rápidamente causando un gran revuelo entre los usuarios, a lo que Uber solo pudo responder confirmando la veracidad de las mismas y acto seguido, anunciar que suspende las pruebas en dicho estado.
La compañía de Travis Kalanick últimamente no parece estar en su mejor momento si hablamos del coche autónomo, después de que tuvieran que abandonar las calles de San Francisco al carecer de permisos para circular en la vía pública. Fue en ese momento cuando con el apoyo de Doug Ducey -Gobernador de Arizona- decidieron trasladar su flota de pruebas a este estado.