Se sigue especulando con el posible sustituto del Land Rover Defender. Después de las sutiles modificaciones estéticas que ha sufrido desde sus inicios, y la puesta a punto mecánica llevada a cabo hace poco, llegó la primera información sobre un posible Defender, de aspecto conceptual, que hipotéticamente daría el relevo al actual en 2015.
Si a la noticia dada en su momento unimos todos los rumores, fundados e infundados, que se filtran a través de las redes sobre este modelo, no es de extrañar que uno ya no sepa qué creer, e incluso que algunos propietarios y amantes de la conducción off road en estado puro puedan estar relativamente inquietos…
Para los que no sepan por donde van los tiros, el Defender es ese acertado modelo con el que no muchas marcas cuentan, que un buen día dio el campanazo demostrando unas capacidades casi inéditas en su segmento y una fiabilidad literalmente a prueba de bomba, que por su aspecto áspero y rudo ha sabido hacerse un hueco encandilando a propios y extraños con su imagen ya entrañable. De lo que no cabe duda es de que es de todo menos refinado, pero es que ahí reside buena parte de su encanto también, ¿sino cómo se iba a poder ver bajando orgullosa a una chica joven bien vestida, de un impoluto Defender corto en el centro de Madrid? Pues porque ya casi ha creado moda. Porque es todo un elemento vintage si me apuras.
Sus capacidades en el campo militar, fueron uno de sus orígenes, aunque hoy eso da un poco igual. En estos momento hace las veces de urbanita, o lo que es lo mismo, que lo que haces con un Volkswagen Up! también lo puedes hacer, algo más tóscamente, con un Defender, sin que ello merme tu imagen.
Pero esta fórmula no es exclusiva de Land Rover. Jeep o Mercedes han seguido la misma estela, este último con el mismo éxito que la marca inglesa, porque el Clase G (a cuál sino podría referirme) es mucho Clase G, más caro, pero consigue vender todavía hoy un número de unidades nada desdeñable. Si tenemos en cuenta que hace poquito Mercedes lo puso de largo con sutiles pero acertados cambios, no era de esperar que entorno al Defender comenzasen de nuevo las especulaciones.
Por eso, han introducido desde nuevos colores de carrocería hasta nuevos equipamientos, con tonalidades como un nuevo negro metalizado o un clásico Habana, así como nuevos diseños para los butacones interiores, un equipo de sonido Alpine que mejora con creces al actual y nuevos colores de contraste para el techo: Santorini Negro, Plata Indus y Gris Orkney entre otros. Aunque mi juicio no basta.
Hace varios meses, incorporó una nueva variante mecánica que ha visto reducida su cilindrada hasta los 2,2 litros, que en su bloque de 4 cilindros con turbo, mejora la potencia hasta los 120cv y consigue un par de 375Nm. Adoptó nuevos discos de freno ventilados y una mejroada caja de cambios de seis marchas así como una nueva reductora.
Prestacionalmente no es brillante ni mucho menos, pero para los que conocemos el modelo, que hoy brinde una aceleración de 0 a 100 por debajo de los 15 segundos y una velocidad máxima de alrededor de 160Km/h es más que un logro casi un milagro para un vehículo de sus peculiares características. No olvidemos que aunque existe una versión V8 que en España no se comercializa, las cifras de esta tampoco son tan halagüeñas, y eso que hablamos de todo un V8 de gasolina…
Por otra parte, la arquitectura del Defender, que es una de sus mayores bazas, no cambia. Todo ha ido pasando poco a poco por la mesa de trabajo de ingenieros y diseñadores, salvo sus tres incombustibles longitudes de chasis. Con todo y con esto, el Defender puede seguir presumiendo de ser el modelo de la marca con más posibilidades de personalización, y de contar con una de las mayores comunidades de usuarios y amantes del modelo.
Fuente: Land Rover
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