El Rally de Mongolia se define por sus organizadores como una de las mejores aventuras de motor en el planeta, atravesando más de 15.000 kilómetros de montañas, desiertos de la estepa europea y asiática cada verano. «Sin apoyo, sin ruta definida, solo tú y tus compañeros aventureros y un pequeño automóvil» la idea parece una auténtica promesa de grandes aventuras y mucha diversión, y aunque a lo largo de los años su ruta se ha visto modificada en varias ocasiones todavía sigue siendo todo un reto para los más valientes. Pero si hay algo todavía más osado es competir en un rally de estas características con un vehículo eléctrico, nada menos que con un Nissan Leaf que ha sido preparado para este hazaña.
Está claro que los tiempos están cambiado en el mundo de la automoción, y si nos sorprende ver un vehículo eléctrico en una competición de estas características nos tendremos que ir acostumbrado poco a poco, y es que cada vez vemos más pruebas de alto nivel dedicadas a los EV como la Fórmula E o la Electric GT Championship. En este caso hablamos de la versión estándar del Nissan Leaf con una nueva batería de 30kWh mucho más prestacional, práctica y con una autonomía incrementada hasta los 250 km, una cifra mucho más respetable. Así ha sido aligerado de peso y preparado para este largo viaje gracias a la compañía RML Group.
Como decimos este viaje tiene una distancia realmente considerable, de más de 15.000 kilómetros saliendo de Reino Unido hasta llegar a Mongolia por todo tipo de parajes y lugares de lo más variopintos. Lo primero que fue modificado de este Leaf fueron sus neumáticos, los cuales se reemplazaron por unos Maxsport RB3 para no tener ningún problema en los diferentes terrenos que cruza dicha prueba, asimismo también se añadieron un juego de llantas ‘Speedline SL2 Marmora‘ que hacen al conjunto más deportivo y salvaje. También nos encontramos con múltiples protecciones adicionales mediante placas soldadas a la carrocería junto con unos frenos mejorados o enormes guardabarros.
En el techo se ha añadido una pequeña rejilla para mejorar su capacidad de carga sin sobrecargar demasiado el vehículo, también cuenta con una pequeña barra de LED para alumbrarnos en las noches más oscuras del rally. Los ingenieros además de modificar el exterior también han llevado a cabo ciertas mejoras en su interior para aligerar el Leaf al máximo, por ejemplo han extraído los asientos traseros junto con sus cinturas de seguridad para ganar unos valiosos 32 kilos en total. Y para casos de emergencia se ha instalado un kit médico y un extintor en su maletero.
El próximo Rally Mongol 2017 representa todo un reto para el Leaf de segunda generación, que pretende mostrar al mundo las bondades de este tipo de vehículos y que también tienen su hueco en los rallys. El cofundador de la empresa detrás de esta iniciativa –Plug In Adventures– es Chris Ramsey, y su primer objetivo es el de resaltar las beneficios del coche eléctrico ante todo.