Siempre que sale al mercado alguna novedad del polémico preparador Liberty Walk es inevitable que centremos toda nuestra atención en ella, pues sus icónicas carrocerías ensanchadas, los alerones desorbitados y sus clásicos remaches dignos del laboratorio de Frankenstein llamarían la atención de cualquiera de los mortales.
En esta ocasión el protagonista es nada menos que el Ferrari 458 Italia y su bloque V8 de 4.499 c.c. capaz de entregar 570 CV a 9.000 rpm y un par motor máximo de 540 Nm a 6.000 rpm. A pesar de que la parte mecánica se mantiene intacta, su aspecto exterior es digno de acaparar todas las miradas gracias al nuevo kit de carrocería del especialista.
Entre las principales novedades estéticas destacan la presencia de un nuevo splitter delantero realizado en fibra de carbono, luces traseras oscurecidas, faros verdes y, como no, nuevas aletas que ensanchan a la bestia plagadas de remaches.
El kit también incluye nuevos faldones laterales, un nuevo parachoques trasero y un enorme difusor que envuelve en esta ocasión a la salida del sistema de escape. La trasera, por su parte, incorpora nuevas rejillas en color negro y un alerón de proporciones bíblicas para aumentar la carga aerodinámica a gran velocidad.
Rematan el conjunto un nuevo juego de llantas firmadas por ADV.1 acabadas en color dorado con medidas 20X9 en el eje delantero y 20×12 en el trasero; mientras que el lateral del Cavallino Rampante luce el sol naciente símbolo de la bandera naval japonesa. Teniendo en cuenta lo ocurrido con la misma durante la Segunda Guerra Mundial (una masacre en gran parte de Asia por parte del ejército japonés que acabó con la vida de más de 20 millones de civiles inocentes), tampoco parece del todo acertado su uso en esta ocasión…