Puede que para muchos el Tesla Roadster no sea nada más que un ínfimo recuerdo en su memoria, pero para Tesla Motors, la conocida empresa estadounidense especializada en la fabricación de vehículos 100% eléctricos, fue su punto de partida. En su día, el roadster biplaza consiguió que el mundo entero se tomara en serio las palabras del visionario Elon Musk y su equipo de ingenieros, y es por ello que el atractivo deportivo vuelve a estar entre los planes de futuro del fabricante.
Al fin y al cabo, los Tesla Model S, Model X y Model 3 son una buena alternativa para aquellos que buscan una gran berlina o un familiar eléctrico pero, ¿dónde quedó ese toque pasional y dinámico que caracterizó a la marca en sus inicios? Pues tranquilos, porque lo volveremos a ver, y llegará con unas aspiraciones mucho más altas gracias a la poderosa fuente de ingresos que va a suponer el Tesla Model 3.
Según afirma el fabricante, lo veremos a modo de segunda generación del modelo, aunque éste variará de forma notoria su diseño, sus proporciones y, por supuesto, su rendimiento, ahora mucho más prometedor. Así, el nuevo Tesla Roadster partirá de una plataforma propia (probablemente la utilizada en el Model 3) que será más larga y más ancha para ofrecer un mayor espacio interior, llegando acompañado de potentes motores eléctricos.
Adicionalmente, todo apunta a que se ofrecerá con varias opciones de paquetes de baterías, en cuyo caso la versión tope de gama podría tener como principal rival al mismísimo Porsche 911 Turbo. Por desgracia, por el momento poco más se sabe de la resurrección de este mítico modelo, pues desde Tesla avanzan que su presentación oficial no tendrá lugar hasta al menos 2018, llegando al mercado en un plazo de aproximadamente tres años.