El transporte de vehículos desde la fábrica hasta el concesionario siempre ha sido un gran quebradero de cabeza para las marcas de coches y es que cada euro cuenta bien para beneficios o para ajustar el precio del coche al máximo y robarle clientes a la competencia.
Aunque la mayoría de coches salen de la fábrica en ferrocarril, hay muchas marcas que emplean métodos como el camión o el barco y aunque ya hemos hablado muchas veces de otros métodos de transporte de vehículos, hoy os voy a hablar del ferrocarril y en concreto de una idea desarrollada por GM.
Antes de hablaros de esta maravillosa idea, hay que remontarse a 1950, cuando los ingenieros alemanes idearon un vagón de dos niveles para transportar su Volkswagen Beetle que pronto se convirtió en un modelo para el transporte de automóviles en todo el mundo. Poco después de la Segunda Guerra Mundial, la industria en general y la del automóvil en particular, se encontraron en uno de los mayores auges económicos de la historia y el sector del transporte tuvo que hacer ajustes para adaptarse a la creciente demanda.
Sin duda alguna el ferrocarril era ideal para transportar vehículos dado el boom de consumo de la posguerra. El aumento de demanda de automóviles fruto de la aparición de una radiante clase media aumentó la venta de coches y con esto, la fabricación y el transporte de los mismos.
Sin embargo, uno de los problemas más preocupantes con estos vagones era el robo, el vandalismo y los daños. Se introdujeron varias innovaciones para tratar de abordar estos problema, pero la solución que encontraron General Motors y Southern Pacific Railroad a finales de la década de 1960 es algo digno de mención.
Esta idea llamada Vert-A-Pac es probablemente una de las más ingeniosas maneras de ahorrar costes en el transporte ferroviario y es que en 1960, General Motors y Southern Pacific Railroad desarrollaron conjuntamente unos vagones que podían maximizar el número de coches transportados.
Con esto no sólo reducían el coste de envío por vehículo, también reducían los tiempos de espera de los clientes y los costes de almacenamiento en campas.
El vagón fue diseñado para el transporte del Chevrolet Vega y ojo, porque en cada uno de los vagones con sistema Vert-A-Pac se podían transportar hasta 30 coches, una cifra lejana y superior a las 18 unidades que podía transportar un vagón de transporte de vehículos convencional -de dos o tres niveles-.
El truco radicaba en que en vez de pisos en los que colocar filas, los coches de los vagones con el sistema Vert-A-Pac se almacenaban de forma vertical, con el morro hacia abajo.
Cuando General Motors comenzó a diseñar el Chevrolet Vega, hicieron algo bastante increíble y es que diseñaron un modelo específicamente para encajar en un nuevo vagón diseñado para transportar Chevrolet Vegas.
Comúnmente conocido como Vert-A-Pac, el nuevo vagón casi duplicó la cantidad de unidades que se podían transportar.
Curiosamente, las unidades se enviaban con gasolina, aceite y todos los fluidos necesarios para el funcionamiento normal del vehículo y para esto, todo el automóvil tuvo que diseñarse para mantener los líquidos en su sitio durante el transporte.
Para mantener los costes de transporte a raya, lo ingenieros del Chevrolet Vega tuvieron que diseñar un deflector de aceite de motor especial para evitar que el aceite inundara el cilindro número 1. Las baterías del Chevrolet Vega tenían tapas de llenado ubicadas en lo alto del borde trasero para evitar derrames de ácido. El carburador fue rediseñado y el depósito del líquido limpiaparabrisas estaba instalado en un ángulo de 45 grados. Además de todo esto, se colocaron espaciadores de plástico entre el motor, la caja de cambios y el chasis para evitar daños.
Una vez que subían las 30 unidades del Chevtolet Vega a las rampas, las puertas del Vert-A-Pac se cerraban gracias a la ayuda de elevadores pesados, guardando el Vega en posición vertical para su transporte y totalmente a salvo de daños, vandalismos y condiciones climatológicas adversas.
El Chevrolet Vega se fabricó hasta 1977, cuando éste y su modelo hermano, el Pontiac Astre, dejaron de fabricarse, momento en el que el sistema Vert-A-Pac desapareció.
El Chevrolet Vega de 1971 era un subcompacto de 4 cilindros disponible en cuatro carrocerías diferentes: sedán, coupé, Kammback y familiar. Este pequeño coche estaba destinado a reemplazar al ChevroletCorvair. Además de las curiosidades que os he contado anteriormente, has de saber que el Chevrolet Vega fue el primer automóvil de GM que montaba frenos de disco de serie en las ruedas delanteras.
Introducido en septiembre de 1970 como el Vega 2300, el nuevo modelo equipaba una mecánica SOHC 14 «2300» de 2.3 L. Este motor usaba un carburador de un solo cilindro que producía alrededor de 71 CV, o una opción de 2 cilindros que aumentaba la potencia hasta 86 CV. El modelo estaba disponible con caja manual de 3 velocidades o de 4 velocidades pero había una semiautomática sin embrague de 2 velocidades.
También estaba disponible un Vega con paquete GT que incluía un motor más potente, un tablero de instrumentos con detalles en madera, un volante deportivo de cuatro radios y un paquete especial.
El precio era realmente competitivo y es que hablábamos de 2.196 dólares que para la época era bastante dinero pero era un producto que ofrecía mucho por relativamente poco.
Fuente | Chevrolet Heritage / Foto Portada Wikipedia Commons / Interesting Engineering / Imur