A lo largo de los 25 años de historia de RS, el Audi RS 6 Avant se ha convertido en un auténtico icono con una gran base mundial de seguidores, y es que carrocerías familiares hay muchas, pero si a un aficionado al mundo del motor le preguntásemos por «el familiar de los familiares», la respuesta sería clara y rotunda: el Audi RS 6 Avant.
El RS 6 Avant es sinónimo de máxima potencia, deportividad y diseño. Sus líneas claras y precisas definen la silueta musculosa, mientras que la estética característica de los paragolpes enfatiza la deportividad exterior. Las tomas de aire y sus detalles en fibra de carbono nos indican que hay algo raro en “ese Audi A6 familiar”, no es uno más del montón, es una mala bestia…
Sirve para todo: ¿Quieres llevar a los niños al colegio? ¡Vale! ¿Quieres llevar cómodamente a la suegra? ¡Vale! ¿Quieres cargar la bicicleta los domingos para ir a la montaña? ¡Vale! ¿Quieres un coche de carreras? ¡Pues vamos a la pista! Cuando abres la puerta y te sientas en el RS 6 Avant, te das cuenta de que estas en un vehículo de competición apto para el día a día.
Hoy los chicos de Carwow han querido enfrentar a las cuatro generaciones del modelo en una carrera de aceleración. El orden de llegada a la meta parece claro, pero en el vídeo podemos ver otras pruebas de lo más interesante, especialmente para analizar cómo ha evolucionado el familiar por excelencia en términos de prestaciones, peso, tecnología y conducción.
Recordemos que la primera generación (C5) montaba un motor V8 biturbo de 4.2 litros con 450 CV (331 kW) y 580 Nm de par. Para el C6, Audi optó por el V10 de 5.2 litros biturbo similar al de los Audi R8, con 580 CV (426 kW) y 650 Nm de par. La generación C7 volvió al V8 biturbo de 4.0 litros y, en su versión Performance, superaba los 600 CV del modelo V8 actual.