Todos nos quedamos con la boca abierta después del que Bentley diese el paso definitivo de su historia contemporánea, presentar un SUV. Bajo el nombre de Bentayga, la marca de vehículos de lujo nos presentó uno de los vehículos más refinados del planeta.
Los detalles en madera, metal y piel, como la precisión de las tolerancias entre los guarnecidos, constituyen el paradigma del lujo británico moderno y su forma de SUV lo sitúan en un mercado en el que es único -o al menos por el momento-.
El corazón del nuevo Bentayga se compone del novedoso motor W12 de 6 litros y doble turbocompresor. Esta potente unidad de 12 cilindros combina la eficacia y el refinamiento con niveles superiores de lujo, potencia y par. Gracias a su potencia de 608 CV y a su par de 900 Nm el vehículo y sus más de 3250 kg son capaces de cubrir el 0 a 100 km/h en 4,1 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 301 km/h.
Vale, todo esto está bien, pero… ¿Cómo suena tanta potencia?
Como norma general, cuando exprimimos al máximo una mecánica de alto rendimiento como la que hablamos, se consiguen dulces melodías que en muchos casos se producen en su totalidad gracias al tubo de escape y es por eso que apenas vas a escuchar nada en vídeo… El Bentayga está enfocado para ofrecer el máximo refinamiento posible.
Pero si no suena nada! Otros segundos de mi vida a la basura no me jodas.