La tasa de criminalidad en Sudáfrica cayó el año pasado, sin embargo, en 2017 aumentó el número de delitos con violencia como el homicidio o el robo agravado tal y como se recoge en los informes estadísticos publicados por el Gobierno surafricano.
Para que te hagas una idea, de media, en Sudáfrica se han registrado 52 muertes por violencia cada día y muchos son derivados de asaltos realizados a casas, negocios o coches.
Para luchar contra el robo de vehículos en Sudáfrica durante los años 90 -momento en el que las cifras de criminalidad estaban por las nubes-, Charles Fourie, un abogado de 33 años, inventó el Blaster, un lanzallamas incorporado en el automóvil.
Cuando el conductor es atacado se activa el dispositivo y presiona un pedal ubicado cerca del acelerador. A continuación se generan dos llamaradas enormes a cada lado del automóvil para neutralizar al ladrón.
En su fase de lanzamiento el Blaster estaba equipado con 26 automóviles, y en unas pocas semanas, el número de pedidos excedió los 760. Debido a lo «drásticos» de la medida de protección, la invención fue rápidamente prohibida.