El 21 de Mayo de 1984, Volkswagen sorprendía al mundo con un Polo realmente salvaje, el Volkswagen Polo Sprint.
Aunque se trataba de un concept, la nota de prensa de por aquel entonces incluso llegaba a decir que podría tratarse de una trasformación especial.
Volkswagen Polo Sprint, un experimento en toda regla
El Volkswagen Polo Sprint era un experimento del departamento de Investigación y Desarrollo de la propia marca. Se había cogido a un Polo y se le habían integrado transformaciones muy raicales pare experimentar con él en lo que se refiere a dinámica y manejo.
El pequeño Volkswagen Polo que se tomó como base fue despojado de muchos de sus elementos con los que llegaba al mercado. Para empezar, el modelo era despojado de su motor de 1.3 litros, de su caja de cambios y de su tracción delantera. En el hueco que este pequeño motor dejaba se instaló el nuevo maletero así como el depósito de combustible que además debía rellenarse desde la toma ahora montada en la aleta delantera derecha.
Elementos prestados del Volkswagen Caravelle
En lo que en un Polo de calle sería el maletero, la marca instaló un motor Bóxer de cuatro cilindros y 1.9 litros procedente del Volkswagen Caravelle al que además se le instaló un compresor y un nuevo sistema de inyección. Gracias al ligero peso del Polo y a esta mecánica, el modelo era capaz de desarrollar 157 CV de potencia. El prototipo era capaz de cubrir el 0 a 100 km/h en menos de 8 segundos y de alcanzar una velocidad máxima de algo más de 201 km/h.
Asociada a esta mecánica nos encontrábamos también con una caja de cambios manual procedente de la Volkswagen Caravelle.
Cambios en el exterior y en el interior
En lo que se refiere al exterior, Volkswagen también practicó muchos cambios y es que la carrocería contaba con muchas modificaciones, muchas de ellas necesarias para acoplar las nuevas entradas de aire, admisión y refrigeración necesarias para la nueva ubicación de la mecánica.
El interesante Volkswagen Polo también sufrió algunos cambios en el sistema de suspensión. Mientras en el eje delantero todo permaneció inalterado, en el eje trasero se instaló un nuevo eje con suspensión multibrazo.
Los pasos de rueda también fueron ampliados con vistas a introducir unas nuevas llantas de aleación de 14″ en las que se instalaban nuevos neumáticos en dimensiones 195/60 R14. Al ofrecer un motor que tenía tres veces más de potencia, el Polo Sprint también recibió un nuevo sistema de frenos compuesto por discos de frenos macizos en las cuatro ruedas.
Desafortunadamente nunca hubo planes reales de comercializar este modelo, sin embargo, estamos seguros que de haber llegado, seguro que se habría convertido en un objeto de colección.
En el interior se instalaron nuevos asientos deportivos, un nuevo tapizado pero curiosamente, se dejaron en su sitio los asientos traseros, algo que eliminaban los modelos similares expuestos por otras marcas.