El Volvo XC40 ha llegado a un competitivo segmento para acaparar todas las miradas. Tras iniciarse su fabricación, la comercialización del Volvo XC40 arrancó hace unas semanas exclusivamente para las versiones más exclusivas y completas de la familia. La buena noticia es que desde marzo se pueden adquirir las opciones más sencillas que destacan por su precio de salida mucho más competitivo e interesante.
Recordemos que la familia del XC40 está disponible con los motores de gasolina 1.5 T3 de 156 CV -la nueva familia de motores de tres cilindros de la firma sueca-, 2.0 T4 con 190 CV y el potente 2.0 T5 con 247 CV, este último siempre ligado a la tracción total a las cuatro ruedas. En diésel la oferta contempla los 2.0 D4 con 190 CV únicamente aunque algo más adelante llegarán las alternativas con 150 CV.
Puede que sea su hermano mayor el que se ha alzado con el premio al Coche del Año en el Mundo 2018, pero lo cierto es que el XC40 está llamado a convertirse en el modelo de mayor volumen del fabricante. Así lo augura la fuerte demanda, y es que el SUV compacto está superando todas las expectativas y no hace más que acumular pedidos. Después de recibir 80.000 reservas para el XC40, Volvo incluso ha tenido que pensar en formas de incrementar la producción, dando prioridad al modelo frente a otros vehículos de la gama sueca.
La fábrica de Ghent, en Bélgica, está funcionando a todo tren, tanto que Volvo Cars también producirá ejemplares del XC40 en su planta de Luqiao, en China, en la primera mitad de 2019. Tal y como declara Hakan Samuelsson, presidente y CEO de Volvo, «el éxito del XC40 ha superado incluso nuestras expectativas más altas. El segmento SUV compacto es el segmento de mayor crecimiento en la industria ahora y con este modelo basado en la plataforma CMA esperamos beneficiarnos aún más de ese crecimiento«.