Está claro que esta noticia no nos pilla por sorpresa. Hace apenas unos días hablábamos de los primeros detalles del Volvo XC40 eléctrico, el que será el primer modelo cero emisiones de la compañía sueca. El avance hacia los automóviles eléctricos constituye el mayor cambio en la historia del automóvil y, por primera vez en más de un siglo, los automóviles se mueven sin un motor de gasolina o diésel en el compartimento del motor y tienen una batería en el parte inferior.
Por eso, no es de extrañar que Volvo Cars y Geely tengan la intención de fusionar sus operaciones de motores de combustión existentes en un negocio independiente, con el fin de establecer un nuevo proveedor global que buscará desarrollar motores de combustión de próxima generación y motores híbridos, mientras que Volvo se centra plenamente en su expansión eléctrica.
Actualmente, Volvo está construyendo una gama de productos completamente electrificada como parte de la ambición de la compañía de poner la sostenibilidad en el centro de sus operaciones. A mediados de la próxima década, se espera que la mitad de sus ventas globales sean totalmente eléctricas y la otra mitad híbrida, suministrada por la nueva unidad de negocio independiente.
Para Geely, la nueva entidad significa que Geely Auto, Proton, Lotus, LEVC y LYNK & CO dispondrían de motores de combustión eficientes tecnológicamente avanzados y motores híbridos, al tiempo que no cierran ninguna puerta a suministrar las mecánicas a terceros fabricantes, proporcionando así a las compañías del grupo posibles oportunidades de crecimiento.
El proyecto contempla importantes sinergias operativas, industriales y financieras, con la intención de ser un empleador atractivo para aproximadamente 3.000 empleados de Volvo Cars y alrededor de 5.000 empleados de las operaciones de motores de combustión de Geely, incluidas las funciones de investigación y desarrollo, compras, fabricación, TI y finanzas.
Lo que no se prevé en ningún caso son las reducciones en la fuerza laboral, lo cual es una gran noticia. Tanto Volvo como Geely están en el proceso de dividir sus operaciones de ICE en nuevas unidades dentro de sus respectivas organizaciones, como un primer paso hacia la fusión de las dos compañías en el nuevo negocio independiente combinado.
Volvo considera que la electrificación de la industria automotriz será un proceso gradual, lo que significa que todavía habrá una demanda continua significativa de trenes de potencia híbridos eficientes junto con ofertas totalmente eléctricas. Por ahora, los planes de esta nueva empresa aun están en desarrollo y sujetos a negociaciones sindicales, las aprobaciones de la junta y las autoridades pertinentes.