No es la primera vez que os hablamos de los olores en un coche. Sin ir más lejos hace unos meses os hablamos sobre los malos olores del aire acondicionado. Ahora nos hacemos eco del olor que desprenden los habitáculos de los coches nuevos.
Para gustos, colores y ahora también olores. Hay gente a la que le gusta el olor a la gasolina, al pegamento, a los libros pero esto, es cuestión de gustos, sin embargo, el olor a coche nuevo le gusta a casi todo el mundo, ¿no?.
Aunque el olor a coche nuevo no es el mismo y varía de una marca a otra, lo cierto es que este está presente en las nuevas unidades que se adquieren «recién» salidas del horno (aunque en algunos países por motivos culturales se elimina -o al menos se intenta, véase el caso de China, donde se intenta eliminar el olor a toda costa porque al comprador no le gusta-)
Hay que subrayar que estos olores están más que estudiados y el resultado de sus mezclas son elegidas por los mismos fabricantes
El interior de un coche nuevo es una intensa mezcla de materiales nuevos o recién fabricados. Plásticos, telas, pieles, electrónica, todo tiene su característico olor a nuevo y cuando se mezclan en el interior de un vehículo generan lo que comúnmente se bautiza como el «olor a coche nuevo«.
Al parecer, ahora nos han comentado que el olor a coche nuevo no es realmente bueno para nosotros y la razón es bastante lógica y creíble. Estas esencias y olores se desprenden de los materiales nuevos y no dejan de ser esencias que emanan de plásticos, telas o materiales sintéticos como producto de su procesamiento durante la fase de fabricación, estampación o fundición.
Todos se agrupan bajo el paraguas de «compuestos orgánicos volátiles» y no son especialmente saludables para los seres humanos.
Tras su creación, todos los compuestos se dejan «curar» en cierto modo en un proceso que se conoce industrialmente como la desgasificiación y que persigue eliminar la pequeñas partículas de retardantes o materiales químicos entre los que encontramos plomo, mercurio o disolventes, algunos de ellos potencialmente nocivos para el ser humano cuando se inhalan -pinturas, pegamentos, plásticos, gomas, etc…-
Aunque no llega a ninguna conclusión, un estudio consultado por Carthrottle ha descubierto una cantidad superior a las 275 sustancias químicas diferentes presentes en el habitáculo de un coche. A pesar de la multitud de sustancias, no todas son perjudiciales para la salud, pero hay que confirmar que algunas sí que lo son…
Como curiosidad, cabe destacar que una de las pruebas que hacen los fabricantes pasa por calentar el coche a más de 60 grados para luego entrar dentro de él y comprobar cómo huelen los materiales porque con el calor se hace más fácil diferenciar los olores.
El calor, algo muy común en verano y cuando dejamos el coche al sol hace que los materiales plásticos y el resto de componentes vuelvan a liberar sustancias químicas al habitáculo, algo que respiraremos cuando nos metamos en el habitáculo y cuando estemos conduciendo el vehículo.
Lo cierto es que poco podemos hacer al respecto. O lo respiramos o aguantamos la respiración hasta que nos bajemos -algo imposible, ¿no?. El estudio parece que no concluye ni la cantidad ni el tipo exacto de estos materiales presuntamente dañinos y tampoco el efecto que estos tienen o pueden tener a la larga en nuestro organismo.
En un futuro no muy lejano, si queremos huir de estos químicos deberemos de recurrir a los materiales vegetales como el cáñamo o algunas fibras vegetales, aunque volveremos a lo mismo, habrá que teñirlas y tratarlas para convertirlas en piezas de automóvil y claro, volveremos a la química.
Y digo yo, ¿si estos olores no son buenos?, ¿son buenos los ambientadores, las colonias y demás «camufladores» de olor?