Motorización
La gama de motorizaciones está compuesta por tres propulsores atmosféricos de gasolina y un turbodiésel. Esta última mecánica es un motor 2.2 litros SKYACTIV-D que ofrece 150 c.v. y un par máximo de 380 Nm.
Entre los gasolina, llama la atención el nuevo SKYACTIV-G 1.5 litros, un motor altamente eficiente y que ofrece un consumo homologado de tan solo 5,0 l/100 km en ciclo combinado, que se complementa con el cambio manual de seis velocidades.
También encontramos en exclusiva para la carrocería de 5 puertas un motor 2.0 SKYACTIV-G que desarrolla 165 c.v. que ofrece una cifra de consumo de 5,8 litros a los 100 km.
El otro motor gasolina corresponde con el que hemos probado en este Mazda3 Sport Sedan. Se trata también de un motor 2.0 SKYACTIV-G que rinde un máximo de 120 c.v. a 6.000 rpm y ofrece un par máximo de 210 Nm a 4.000 rpm. Este motor está disponible tanto con cambio manual como con cambio automático, teniendo este último unos consumos algo superiores. En conducción urbana homologa 6,5 litros a los 100 km, mientras que para recorridos extraurbanos la cifra baja hasta los 4,3 litros a los 100 km. Esto nos da una media de 5,1 litros a los 100 km para ciclo combinado. (datos correspondientes al cambio manual que es el probado)
Las cifras reales de consumo son realmente sorprendentes, ya que pese a no llegar a las homologadas por Mazda, es relativamente sencillo obtener medias de consumo que ronden los 5,5 litros a los 100 km sin buscar una conducción eficiente.
La “culpa” de esas bajas cifras de consumo la tiene sin duda la tecnología SKYACTIV, ya que, por ejemplo, las transmisiones de seis velocidades del nuevo Mazda3, especialmente desarrolladas para los motores SKYACTIV, responden con fidelidad a las instrucciones del conductor, proporcionando una potencia lineal a las ruedas delanteras y contribuyendo a una notable mejora en el consumo de combustible.
En cuanto al motor, estamos en una época en la que la mayoría de los fabricantes están optando por reducir la cilindrada de sus motores manteniendo la potencia mediante turbocompresores, para lograr así motores más ligeros y eficientes. Mazda rompe con lo establecido y ha renunciado a ese planteamiento en su gama de motores de gasolina de cuatro cilindros SKYACTIV-G. En su lugar, ha optado por relaciones de compresión ultra altas, aspiración natural y diseño ligero, para conseguir el mejor equilibrio posible entre entrega potencia y consumo eficiente de combustible; con un resultado que desde luego sorprende positivamente.
Los datos de consumo son prácticamente iguales o mejores que los que ofrecen otros motores que si han visto reducida su cilindrada para buscar una mayor eficiencia. Lo que si notamos es que al ser un motor atmosférico, tiene menos nervio que los motores turboalimentados, especialmente en bajas revoluciones.
El Mazda3 con el motor SKYACTIV-G de 120 c.v. es un coche con una entrega de potencia muy lineal, desde dentro no tenemos la sensación de que acelere con fuerza, pero debemos recordar que hace el 0-100 km/h en 8,8 segundos, por lo que no va a dejarnos “tirados” a la hora de adelantar o de necesitar fuerza al incorporarnos en una rotonda.
Circulando por ciudad vemos que el motor no se queja si circulamos en marchas largas, lo que se agradece para lograr un mejor consumo, aunque si en algún momento necesitamos algo más de fuerza, deberemos reducir.
Algo parecido sucede en las carreteras secundarias y de montaña, ya que para circular a ritmo tranquilo, el motor es suficiente, pero si queremos realizar una conducción más deportiva a un ritmo más alto, será necesario que juguemos con el cambio y aprovechemos la zona alta del cuentarrevoluciones. Las suspensiones van perfectas para este motor, ya que no necesitamos unas más duras y deportivas que sacrificarían el confort.
En autopista y conduciendo durante más de dos horas seguidas, puedo afirmar que la fatiga al volante es prácticamente nula. La postura de conducción y la buena visibilidad hacen que podamos devorar kilómetros sin darnos cuenta del tiempo que llevamos conduciendo. Además, el consumo instantáneo, circulando a unos 110 km/h se sitúa por debajo de los 5 litros de manera habitual, por lo que también tardaremos en parar repostar.
Precio
El Mazda3 más asequible es la carrocería de 5 puertas, con el motor SKYACTIV-G 1.5 de 100 c.v. en el acabado Pulse, que tiene un precio de 17.750 euros.
La carrocería SportSedan cuesta 500 euros más que la de 5 puertas, por lo que una unidad como la que hemos probado, con el motor SKYCTIV-G 2.0 de 120 c.v. tienen un precio de 23.600 euros, a los que debemos sumar el color Sapphire Blue Metallic que cuesta 450 euros, y el pack Navi que cuesta 400 euros. Todo ello hace un total de 24.450 euros.
Resumen de Prueba
Equipamiento
Diseño
Confort
Consumo
Motor
8.3
Notable
La propuesta de Mazda para el segmento C es capaz de aumentar la calidad de las generaciones anteriores y presentar un modelo que aspira a lo más alto.
Un diseño interior un poco espartano, pero por lo demás, cada vez me gusta más el producto de estos japos, prestaciones y fiabilidad a un precio más que razonable…
Espero poder ver de cerca uno de estos pronto!
Espartano? Y un bmw que es prehistorico? Porque es del mismo rollo mas o menos
Para mi el coche más feo interiormente hablando ha sido el BMW Serie 3 del 2005 al 2012.
Jajajaja BMW es una puta mierda por dentro! Lo siento por los q le guste esta marca…